La historia es algo así: la nube ofrece la oportunidad de mover datos a una ubicación fuera del sitio, a menudo alojada por un proveedor de tecnología, lo que significa que los datos son más fácilmente accesibles de forma remota y a menudo se entregan en un SaaS (software- modelo como servicio) para que una empresa de construcción no tenga que pagar todos los costos por adelantado, sino que se puede extender en un enfoque basado en suscripción.

Los analistas muestran que, de hecho, están firmemente arraigados en la era de la nube. La semana pasada, IDC informó que se pronostica que el gasto mundial en infraestructura y servicios de nube pública alcanzará los $ 210 mil millones en 2019, lo que representa un aumento enorme del 23.8% respecto al año pasado. 

Ese es un gran crecimiento que no se ralentizará pronto. Mirando hacia cinco años, IDC dice que crecerá a una tasa de crecimiento anual compuesta de 22.5% en 2022. SaaS es una de las categorías más grandes de computación en la nube, con IaaS (infraestructura como servicio) como el segundo más grande categoría, y PaaS (plataforma como servicio) muy cerca.

También vemos que los proveedores de tecnología continúan haciendo grandes inversiones en la nube también. Por ejemplo, Computer Guidance Corp., anunció recientemente una inversión de $ 1.3 millones en infraestructura en la nube para respaldar su creciente oferta de servicios de alojamiento administrado.

Esta es ahora su tercera inversión en centros de datos de alojamiento en la nube de este tamaño en los últimos cinco años, lo que demuestra que la industria de la construcción está adoptando el cambio a la nube. Computer Guidance ya tiene dos centros de datos en la nube compatibles con el Control de organización de servicios de nivel III: uno ubicado en Phoenix, Arizona, y otro ubicado en Atlanta, Georgia. El centro de datos más nuevo proporcionará un crecimiento del 50% en la capacidad de infraestructura en la nube para soportar la empresa trayectoria de crecimiento.

Si bien la industria de la construcción está inmersa en la era de la nube, quizás otra tendencia emergente a tener en cuenta es la computación de vanguardia, a veces llamada computación de niebla. Aquí, la potencia de procesamiento se devuelve a un dispositivo final centralizado local o computadora para administrar un servicio particular para un evento. Esto permite que cada computadora administre su propio procesamiento de datos.

Fuente: ConstruTech.